Desde aquí donde se me caen los dientes por el vano deporte de no decir nada,
he decidido blasfemar un pensamiento, corromper el orden, escupir al viento,
ya no escribo destinatarios, no se de entes a quien culpar,
pues no se de sus conciencias, no se del tiempo, no se si es real.
llana es la hora en que pienso esto en que me ahogo hoy,
solo espero que en el infinito estalle esto que pienso aquí,
que rompa entonces, que quiebre sueños del mas allá,
despierte magos, deshaga intentos de naufragar.
quiero llenar mi boca de duros golpes de soledad
quiero gritar un nombre, invalidado, muy ancestral
quiero romper en llanto, que impulse mi odio descomunal
que esconde restos desconocidos por recordar.
no se si entonces despierte alguien en un sitio
quizá sea un niño, quizá un anciano, quizá otra cosa
se frote el rostro, y me haga no existir ya,
y viva entonces como un recuerdo junto a mi mundo, que no fue mas
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